A medida que avanza la tecnología de empaquetado a nivel de oblea (WLP), los fabricantes se ven presionados para manejar protuberancias más pequeñas, pasos más finos y una integración de mayor densidad. En Taiwán, donde el WLP se aplica ampliamente en la producción de CPU, GPU y ASIC, uno de los desafíos más difíciles que enfrentan los ingenieros es controlar las trayectorias de flujo de relleno inferior extremadamente estrechas.
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Cuando el adhesivo se extiende más allá de la trayectoria de flujo designada, surgen problemas. El desbordamiento puede provocar contaminación en las zonas de exclusión (KOZ), crear huecos de aire o dañar los componentes cercanos. Al mismo tiempo, un llenado insuficiente puede dejar vacíos debajo del troquel, lo que debilita la fiabilidad a largo plazo. Estos problemas pueden aumentar los costos de reelaboración y reducir el rendimiento, lo cual es una gran preocupación para las fábricas que operan líneas de producción de alta capacidad.
Aquí es donde entran en juego los sistemas avanzados de dispensación por chorro en línea como el GS600SUA. Construido específicamente para aplicaciones de flip chip y WLP de alta fiabilidad, el GS600SUA combina la tecnología de chorro piezoeléctrico con una alineación visual precisa para mantener las trayectorias de flujo de pegamento dentro de las tolerancias más estrictas. Su control KOZ (<250 μm) garantiza que el material nunca cruce los límites sensibles, mientras que su gestión de flujo capilar mantiene la altura del adhesivo por debajo del 70% de la pared lateral del troquel, factores clave para un relleno inferior estable y uniforme.
Otra característica crítica es la calibración de peso en tiempo real. Al monitorear el volumen de pegamento sobre la marcha, el sistema mantiene la variación dentro de ±3%, lo que ayuda a los fabricantes a lograr resultados consistentes en miles de obleas. Para las líneas de producción en Taiwán que operan con alta humedad y cambios de temperatura, la corrección de temperatura incorporada en la máquina evita que el estrés térmico afecte el flujo del adhesivo.
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Un ejemplo de ello es una planta local de empaquetado WLP que se centra en la integración 2.5D avanzada. Los ingenieros de allí informaron problemas frecuentes de desbordamiento al intentar gestionar protuberancias de paso fino con dispensación convencional. Después de cambiar a un sistema de chorro en línea con control de trayectoria estrecha, observaron una mejora notable en el rendimiento, la estabilidad y el rendimiento. No solo se minimizaron las violaciones de KOZ, sino que la reducción de la reelaboración también ahorró importantes costos de producción.
Para los fabricantes taiwaneses, la demanda es clara: un mejor control de la trayectoria de flujo equivale a un mayor rendimiento y una mayor competitividad. A medida que los dispositivos se vuelven más pequeños y complejos, la capacidad de dispensar con precisión, sin desbordamiento, vacíos ni desperdicio de material, ya no es opcional. Es un requisito fundamental para mantenerse al día con los estándares globales en el empaquetado de semiconductores.
Con soluciones como el GS600SUA, las fábricas de WLP pueden dar un paso práctico para enfrentar estos desafíos. Al invertir en equipos diseñados para trayectorias adhesivas ultrarreducidas y un control de proceso estable, las líneas de semiconductores de Taiwán pueden lograr la consistencia necesaria para mantenerse a la vanguardia en la cadena de suministro global.
A medida que avanza la tecnología de empaquetado a nivel de oblea (WLP), los fabricantes se ven presionados para manejar protuberancias más pequeñas, pasos más finos y una integración de mayor densidad. En Taiwán, donde el WLP se aplica ampliamente en la producción de CPU, GPU y ASIC, uno de los desafíos más difíciles que enfrentan los ingenieros es controlar las trayectorias de flujo de relleno inferior extremadamente estrechas.
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Cuando el adhesivo se extiende más allá de la trayectoria de flujo designada, surgen problemas. El desbordamiento puede provocar contaminación en las zonas de exclusión (KOZ), crear huecos de aire o dañar los componentes cercanos. Al mismo tiempo, un llenado insuficiente puede dejar vacíos debajo del troquel, lo que debilita la fiabilidad a largo plazo. Estos problemas pueden aumentar los costos de reelaboración y reducir el rendimiento, lo cual es una gran preocupación para las fábricas que operan líneas de producción de alta capacidad.
Aquí es donde entran en juego los sistemas avanzados de dispensación por chorro en línea como el GS600SUA. Construido específicamente para aplicaciones de flip chip y WLP de alta fiabilidad, el GS600SUA combina la tecnología de chorro piezoeléctrico con una alineación visual precisa para mantener las trayectorias de flujo de pegamento dentro de las tolerancias más estrictas. Su control KOZ (<250 μm) garantiza que el material nunca cruce los límites sensibles, mientras que su gestión de flujo capilar mantiene la altura del adhesivo por debajo del 70% de la pared lateral del troquel, factores clave para un relleno inferior estable y uniforme.
Otra característica crítica es la calibración de peso en tiempo real. Al monitorear el volumen de pegamento sobre la marcha, el sistema mantiene la variación dentro de ±3%, lo que ayuda a los fabricantes a lograr resultados consistentes en miles de obleas. Para las líneas de producción en Taiwán que operan con alta humedad y cambios de temperatura, la corrección de temperatura incorporada en la máquina evita que el estrés térmico afecte el flujo del adhesivo.
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Un ejemplo de ello es una planta local de empaquetado WLP que se centra en la integración 2.5D avanzada. Los ingenieros de allí informaron problemas frecuentes de desbordamiento al intentar gestionar protuberancias de paso fino con dispensación convencional. Después de cambiar a un sistema de chorro en línea con control de trayectoria estrecha, observaron una mejora notable en el rendimiento, la estabilidad y el rendimiento. No solo se minimizaron las violaciones de KOZ, sino que la reducción de la reelaboración también ahorró importantes costos de producción.
Para los fabricantes taiwaneses, la demanda es clara: un mejor control de la trayectoria de flujo equivale a un mayor rendimiento y una mayor competitividad. A medida que los dispositivos se vuelven más pequeños y complejos, la capacidad de dispensar con precisión, sin desbordamiento, vacíos ni desperdicio de material, ya no es opcional. Es un requisito fundamental para mantenerse al día con los estándares globales en el empaquetado de semiconductores.
Con soluciones como el GS600SUA, las fábricas de WLP pueden dar un paso práctico para enfrentar estos desafíos. Al invertir en equipos diseñados para trayectorias adhesivas ultrarreducidas y un control de proceso estable, las líneas de semiconductores de Taiwán pueden lograr la consistencia necesaria para mantenerse a la vanguardia en la cadena de suministro global.